Puedo escuchar el mar

 

Puedo escuchar el mar” (Umi ga Kikoeru, también conocida como Ocean Waves) es una película de animación japonesa producida por Studio Ghibli y estrenada en 1993. Dirigida por Tomomi Mochizuki, esta obra se distingue por su enfoque realista y costumbrista, alejándose de los elementos fantásticos que caracterizan a otras producciones del estudio. 

La historia se centra en Taku Morisaki, un estudiante universitario que, al ver a una joven en una estación de tren, rememora sus años de secundaria en la ciudad costera de Kōchi. Durante ese periodo, su vida y la de su mejor amigo, Yutaka Matsuno, se ven alteradas por la llegada de Rikako Mutō, una estudiante transferida desde Tokio tras el divorcio de sus padres.

es inteligente, atlética y destacada en los estudios, pero su actitud distante y su dificultad para adaptarse generan tensiones en su entorno. A medida que se desarrolla un triángulo amoroso entre los tres jóvenes, la película explora las complejidades de la adolescencia, la amistad y el amor no correspondido.

Puedo escuchar el mar” fue concebida como un proyecto para televisión, con el objetivo de permitir que jóvenes talentos de Studio Ghibli asumieran roles clave en la producción. Tomomi Mochizuki, con 34 años en ese momento, fue seleccionado para dirigir la película. Aunque se planeó como una producción “rápida, barata y de calidad”, el proyecto superó tanto el presupuesto como el cronograma establecidos .

La película se basa en la novela homónima de Saeko Himuro y fue adaptada al guion por Keiko Niwa. El diseño de personajes y la dirección de animación estuvieron a cargo de Katsuya Kondō. La banda sonora, compuesta por Shigeru Nagata, complementa la atmósfera melancólica y nostálgica de la narrativa . 

A diferencia de otras películas de Studio Ghibli, “Puedo escuchar el mar” se enfoca en un relato realista y cotidiano. La trama aborda temas como la transición de la adolescencia a la adultez, las relaciones interpersonales y la búsqueda de identidad. La ambientación en la ciudad costera de Kōchi y la representación de las emociones juveniles aportan una sensación de autenticidad y cercanía.

El estilo de animación es sobrio y detallado, reflejando la vida cotidiana de los personajes sin recurrir a elementos fantásticos. Esta aproximación permite una exploración más profunda de las emociones y conflictos internos de los protagonistas.

Aunque “Puedo escuchar el mar” no alcanzó la popularidad de otras obras de Studio Ghibli, ha sido valorada por su enfoque íntimo y realista. La película ofrece una visión sincera de la juventud y las complejidades emocionales que la acompañan.

En 2022, la película fue lanzada en formato Blu-Ray y DVD en España por Vértigo Films, permitiendo que nuevas audiencias descubran esta obra menos conocida del estudio . 

Puedo escuchar el mar” representa una faceta diferente de Studio Ghibli, alejándose de lo fantástico para centrarse en una narrativa realista y emotiva. A través de una historia sencilla pero profunda, la película captura la esencia de la adolescencia y las emociones que la definen. Es una obra que, aunque discreta, ofrece una experiencia cinematográfica reflexiva y conmovedora.